jueves, 24 de septiembre de 2009

La excelentísima chabola de los diputados

Los parlamentos de cada país son el símbolo de la soberanía del pueblo, el edificio donde los representantes de la ciudadanía se reúnen para ejercer la democracia, esa grandiosa doctrina tan santificada hoy día. Se espera que dicho lugar refleje en su arquitectura y entorno la magnificencia de tales ideales. Como ejemplo de ello basta buscar en Google (escribiendo -nombre del país- parliament, ej.: "german parliament") fotos de los parlamentos de diversos países. Como muestra esta selección:


Portugal



Francia


Alemania


Reino Unido


Queda clara la importancia de lo que se lleva a cabo dentro de estos edificios con sólo verlos por fuera. En teoría, el Congreso de los Diputados de nuestro país no es menos en este aspecto. Cuando buscamos fotos suyas, encontramos imágenes muy bonitas, como estas:





Pero la realidad es muy otra. Estuvimos allí recientemente y lo que vimos (nunca antes antes habíamos estado allí) nos indignó tanto que nos sentimos impelidos a escribir este artículo. El Congreso de los Diputados es un edifico anodino, pequeño, bajo y achaparrado y con la excepción del pórtico es en general bastante feo. Sin embargo, lo peor no es eso. El lugar donde está situado no podría ser más desafortunado. Está en una calle estrecha, nada de grandes plazas ni parques como en los ejemplos anteriores y lo que tiene enfrente es una plazuela digna más bien de una aldea. Es como si fuera la casa de un nuevo rico en un barrio del extrarradio, lo único que le da un poco más de carisma son los rampantes leones de la entrada. Por si todo esto fuera poco, en el exterior las obras invaden la calle afeando todavía más la estampa, cortesía de Gallardón el Constructor. Miren, miren:





Ahora nos explicamos por qué en las fotos oficiales nunca se ve el edificio entero, ni el entorno, sino que casi siempre las fotos son hechas desde muy abajo y junto a un león para dar impresión de edificio alto e imponente. Los mismos fotógrafos, oficiales o periodistas, son conscientes de la fealdad general y vergonzosa del edificio, y la disimulan o maquillan buscando determinados ángulos y encuadres, que, como hemos visto, siempre son parecidos unos a otros.

Hasta los parlamentos regionales de nuestro país tienen mejor pinta, qué despropósito:

Cataluña

Andalucía

Como ven, una vergüenza. Parece mentira que el edificio más importante de nuestro país ( porque el corazón de nuestra democracia es más importante que la residencia del Presidente o del Rey, es decir, más importante que la Moncloa o que el palacio de la Zarzuela) sea este, y que esté así, medio escondido en una calle menor y en estas condiciones. Pero aún hay más.

El lugar donde se toman todas las decisiones de Estado y al que acuden todos los políticos principales y dirigentes de este país, está "protegido" por un par de policías nacionales que apenas prestaban atención a lo que pasaba a su alrededor, sino que charlaban entre sí, sin ninguna formalidad y poniendo en peligro tanto el edificio como a los que hay dentro de él. Esto puede parecer algo exagerado, pero pensemos. Cualquier loco disfrazado de obrero puede saltar la valla de obras, colarse en el el Congreso y poner una bomba, no digamos ya si fuera un yihadista y se inmolase. Y los dos policías cutres de la entrada no se darían ni cuenta, que es lo más triste de todo el asunto.
En muchos otros países tienen guardias perfectamente plantados en su puesto, con ametralladoras o fusiles, vestidos con un uniforme específico y formal, sin hablar con nadie ni entre ellos y muy atentos a todo, dando así imagen de seguridad y seriedad.


La formidable Guardia del Congreso
Como ven, los españoles somos cutres hasta para lo que debería ser el edificio central de nuestra nación. Se nos llena la boca con la palabra "¡ESPAÑA!" pero luego no le damos la importancia suficiente a lo que realmente la merece. Así va este país, no prestamos ninguna importancia a los detalles, con la excepción de los estúpidos, y somos bastos y descuidados. No podemos pretender compararnos a los demás países si ni siquiera somos generosos y cuidadosos con nuestros símbolos, que es donde más fácil es serlo. Parece algo material, todo este tema, pero no nos cabe duda de que esto sólo es la punta del iceberg de una manera de pensar chabacana e inculta, que por desgracia es lo que impera en este país. Y es que los símbolos son precisamente eso, emblemas que recogen toda una forma de pensar y de sentir. Así que si miramos como es el símbolo del que trata este artículo (escondido, descuidado, desprotegido, calles levantadas y en obras, pequeño, feo...) sólo podemos echarnos a llorar.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Inauguración solemne de este nuestro blog

Bienvenidos a todos, damas y caballeros. En este blog pretendemos exponer una visión de temas actuales y no tan actuales con un enfoque distinto al de los medios normales, libre de prejuicios y de influencias externas, bien fundamentado y documentado, algo totalmente independiente. Además también informaremos sobre nuestras investigaciones acerca de áreas del conocimiento que nos interesen particularmente, ya sea relacionado con el arte, la literatura, la historia, la política, etc.

Esperamos que os guste, y si no, que al menos os haga pensar.